MESSA, O LA EXCEPCIÓN
La excepción en la historia del arte del siglo XX es un grado. Quiero decir que mantener una trayectoria alternativa a la del denominador común de los artistas de tu tiempo es un hecho diferencial que hay que destacar. A pesar de que, probablemente, este hecho diferenciador o alternativo pueda producir olvidos o exilios sin explicación en términos histórico-gráficos. De alguna forma el caso de Francesc Sempere “Messa” me parece que puede encajar con este parámetro de la excepción o de la singularidad.
Nacido a mediados de los años diez, Messa hubiera tenido que formar parte natural de una generación de artistas marcada por la Guerra Civil, ya sea porque se vio forzado al exilio, o ya sea porque sobrevivió en los ambientes culturales tan deshabitados de la postguerra. Él, pero, se incorporó más tarde dentro de los circuitos o sistemas artísticos; de hecho, no es hasta principios de los años sesenta cuando, con la base de un trabajo autoformativo realiza sus primeras apariciones públicas con su obra plástica. He aquí la primera singularidad de su creación. Más todavía, entre los sesentas y los noventas, Messa no se cierra a un estilo, sino que, igual en Barcelona que en Valencia, realiza una obra heterogénea, llena de un sentido alto de la experimentación, donde las influencias parecen venir de autores y de movimientos diversos cronológica y geográficamente. En plena madurez vital, cuando muchos artistas caen en la repetición, en la creación horizontal, Francesc Sempere vive el arte con una intensidad renovada. Con verticalidad. Para poner un ejemplo: sus ambientes –o instalaciones–, como el de “Les petites puces de París”, son fruto de una regeneración constante, como lo demuestra el uso que realiza de objetos en desuso, especialmente este imaginario tan particular lleno de muñecas descuartizadas y aisladas de su función lúdica.
Esta experimentación prolongada sería el segundo grado de la excepcionalidad de su obra. Me parece que todavía podríamos encontrar más singularidades: la mezcla de figura y experimentos la interdependencia de sus propósitos escultóricos y pictóricos, el abandono de un centro como Barcelona para volver a su Albaida natal…
Ante todo Messa es de los autores que cuentan con una trayectoria fuera de los registros habituales o regulares. Messa es una excepción. Y como tal excepción puede ser que los sistemas artísticos de su tiempo no supieran como interpretarlo, como colocarlo dentro de unos registros determinados, fruto de esa tendencia a clasificar, ordenar y priorizar a la que críticos y historiadores estamos unidos.
Dicen que el paso del tiempo coloca las cosas en su sitio justo. Es probable, pues, que a partir de esta exposición la singular obra de Messa sea reconsiderada a la luz de una nueva mirada crítica.
Joan M. Minguet Batllori
Departamento de Arte, UAB
OCHENTA AÑOS
Hoy Messa cumple ochenta años.
Messa, para quien no lo conoce, es un gran hombre.
Grande en muchos aspectos: un gran amigo, un corazón grande, un gran pensador, un gran defensor de los derechos, grande es el amor a su país, grande tiene la voz y, como no, un gran artista.
Artista es Messa, como pocos. Pocos llevan a cabo la dualidad arte/vida; porque a pesar de los obstáculos que ha encontrado en su vida, Messa ha dejado fluir por sus delicadas manos la voz chillona de sus pensamientos.
Pensamientos, unos como hachas; otros, poesía. Todos juntos dando coraje a la libertad.
Libertad, palabra mayúscula.
Palabra y amor le queremos dedicar desde esta comisión que no es más que una pequeña representación de un montón de amigos y compañeros que admiramos, valoramos y amamos a este gran hombre.
La Comisión de Amigos de Messa
Considero que su obra está llena de sensaciones, porque delante de cualquiera de sus cuadros o de sus esculturas nunca te quedarás indiferente, siempre hay algo que te llega, que, en definitiva, quizás es lo que el artista busca.
Igual que otros «albaidenses», parece que Messa ha encontrado en el mundo del arte los valores más auténticos, y a raíz de esto, esta obra está llena de matices y referencias. Paco ha sido un pintor que siempre ha dado soporte a los jóvenes que han venido a su casa a explicarle sus inquietudes creativas, y ello dice mucho en su favor.
En nombre de la corporación que me honra presidir, enhorabuena por toda una vida llena de lucha y de arte.
Joan Bodí i Quilis
Alcalde de Albaida
MESSA, UNO DE NOSOTROS
Es un honor para el Departamento de Cultura del Ayuntamiento de «Ontinyent» -a quien represento en estos momentos- poder ofrecer nuestra colaboración en la exposición-homenaje que distintos organismos, entidades y personas han preparado con motivo del ochenta aniversario de Messa. Y lo es por dos motivos fundamentales. Por una parte, por el reconocimientos que supone a la larga trayectoria profesional de uno de nuestros artistas más conocido y reconocido.
Por otra parte, porque supone un ejemplo, primitivo, de las posibilidades que la coordinación intermunicipal tiene en el campo de la gestión cultural.
La necesidad de un círculo de cooperación intracomarcal resulta ahora mismo tan vital que no puedo dejar de hacer referencia -y de repetirlo- en cualquiera de los fórums en que participo. Quizás ahora no sea la hora ni el momento -podéis pensar-, hay que hablar de Messa, pero es a él precisamente a quien me estoy refiriendo.
Él y muchos otros artistas sólo son conocidos por un círculo reducido de amigos, porque no tienen la oportunidad de mostrar al público su obra.
Porque, vamos a ver, ¿cuántas exposiciones ha realizado MESSA en » La Vall d’Albaida»? ¿Por qué razón no es más conocido en su casa? ¿Cuál es el trato y el reconocimiento que ofrecemos a nuestros pintores, escultores, músicos, actores, escritores, etc…?
Todavía me parece casi imposible que, en las condiciones en que la cultura se desarrolla en nuestra comarca -con la falta de medios, de infraestructuras y de recursos humanos- haya personas que tengan «el atrevimiento» y «el valor» de continuar trabajando, reflexionando, interrogando al mundo que los envuelve y sus propios mundos interiores. MESSA es una de estas personas.
Que «La Vall d’Albaida» sea un brote de personas inquietas en el sector cultural es algo que se sabe.
Aquel que tenga tiempo, afición y una santa paciencia para la búsqueda, algún día nos dará la sorpresa de catalogar todo lo bueno y lo mejor que nuestra comarca ha dado.
MESSA estará, sin lugar a dudas, en un lugar destacado. Por ahora, nuestra modesta contribución consiste en poner al alcance de todos los ciudadanos su mirada y sus planteamientos estéticos para que se puedan compartir y analizar. En esta retrospectiva podemos encontrar algunos de sus interrogantes y de las obsesiones que han hecho que MESSA se dedicara a la pintura.
Solamente me queda agradecerle sinceramente toda la dedicación y el esfuerzo creativo que ha invertido para explicarnos el mundo a su manera, tal como él lo ve o lo intuye.
Y espero también que esta exposición pueda servir para dar a conocer su trabajo a una comarca de la cual él forma parte. Y, finalmente, para que llegue a ser considerado como lo que él nunca ha dejado de ser: uno de nosotros.
Rafael Portero Tortosa
Regidor de Cultura, Museos y Publicaciones
Ayuntamiento de Ontinyent
Pocos artistas han intentado con tanta fuerza, desde su propia tierra natal, el riesgo plástico de crear. Esta muestra es el testamento inolvidable, de un hombre que mantuvo siempre su inquietud artística y su humanismo. Ojalá Francesc Sempere «MESSA» pueda servir de ejemplo a todos aquellos que desde pequeños y casi olvidados lugares, trabajan y luchan por dejar un testimonio vivo y una aportación a la historia de nuestra tierra.
José Rafael García-Fuster y González Alegre
Tte. Alcalde Delegado de Cultura, Deportes y Patrimonio Histórico
Sempere, Francesc.
Con el nombre artístico de Messa, el valenciano Francesc Sempere (Albaida 1915) nos ofrece una curiosa muestra de construccionalismo abstracto lastrado siempre de intención erótica. Sus exposiciones fueron reiteradamente prohibidas bajo la acusación de obscenidad. El óleo que ilustra estas páginas se titula Homenaje a Zabaleta y está inspirado en una copla que escuchó en Quesada, el pueblo natural del pintor a quien se recuerda:
A las tres de la mañana,
con la luna ya en la cumbre,
hay más mujeres follando
que pucheros en la lumbre.
Camilo José Cela Enciclopedia del Erotismo – 1977
Mi querido amigo:
Acabo de adquirir el fascículo nº 53 de la Enciclopedia del Erotismo, y veo en él la reproducción de un cuadro tuyo que titulas «Homenaje a Zabaleta». Hace poco, con motivo de la pasada pascua, estuve unos días en Quesada y pude ver la sala «Amigos de Zabaleta», que recientemente se ha instalado. Creo que una persona como tu, que ha dedicado específicamente una obra a Zabaleta, debería estar representando en esa sala, y precisamente con esta obra, si esto fuera posible. Como ya sabes, aquel museo no dispone de medios económicos, pero si de obras de sus amigos, tan importantes como Miró, Tapies, Guinovart, García Ochoa, Manolo Cuixart y otros más, los cuales han entregado una obra suya especialmente dedicada a Zabaleta, como homenaje y recuerdo. Si puedes hacer tu algo semejante, como ya conoces a mi hermano Basilio, director del Museo, puedes dirigirte a él. A mi, como te digo, me gustaría mucho que esta obra tuya de la Enciclopedia del Erotismo pudiera figurar allí.
Con mi felicitación, recibe un afectuoso abrazo de tu buen amigo.
Cesáreo Rodríguez Aguilera Barcelona 11 de mayo de 1977